Mathieu Van Der Poel, cuando competir es una obsesión.

Mathieu Van Der Poel tiene un terrible problema, la competitividad extrema.

Para muchos, Mathieu ha llegado en 2020 al pelotón internacional, pero el susodicho lleva mucho tiempo mostrando sus virtudes en otras modalidades y haciendo grandes proezas.

En nuestra retina siempre quedará el mejor sprint de la historia, conquistando la Amstel Gold Race de 2019.

Varias Disciplinas y solapamiento de temporadas.

Mathieu Van Der Poel es un ciclista anárquico, su técnica, su potencia, su valentía y su locura, le caracterizan.

Durante dos años le hemos visto tirar sin pedir relevo, no mirar la distancia a meta, destrozar a la manada de Lobos y perder mucho más de lo que debería.

Todas estas cualidades mencionadas previamente, hacen las carreras mucho más entretenidas pero también le penalizan a la hora de conseguir victorias.

Cuando Mathieu gana, es porque es el más fuerte, pero por su forma de ser, no aprovecha a sus compañeros, ni permite la estrategia de equipo.

Por otro lado hay que destacar sus virtudes, una técnica depurada sobre la bici, que proviene de competir en tres modalidades diferentes y un físico excepcional que le permite se competitivo en cualquier época del año.

COMPITE EN 3 DISCIPLINAS (CX, MTB, CARRETERA)

Con cuatro campeonatos del mundo ganados en Ciclo Cross ( 2015, 2019, 2020, 2021), victorias en el campeonato Europa de MTB y Monumentos conquistados en ciclismo de carretera, podemos decir que este corredor no tiene techo.

Su gran objetivo es ser campeón mundial en estas tres modalidades, esto provoca que sus temporadas sean atípicas, estando compitiendo al máximo nivel todo el año, sin descanso.

Querer solapar estas tres modalidades conlleva un gran esfuerzo, cambiar posiciones, transmisiones, adaptar tu forma de correr a lo que requiere la disciplina y la falta de entrenamiento específico.

Por ello y por ser competitivo durante 365 días al año, podemos considerar a Mathieu, el corredor más talentoso sobre una bicicleta.

SUS GRANDES DEFECTOS, LA FALTA DE DESCANSO Y LA ESTRATEGIA EN CARRERA:

Su genialidad le hace grande, pero también le lleva a perder bastantes carreras durante toda la temporada.

Competir de un modo ininterrumpido, le impide tener una planificación estructurada, perdiendo los picos de forma y no siendo tan competitivo como podría ser si tuviese un número de objetivos menor.

LA ESTRATEGIA EN CARRERA de Mathieu Van Der Poel, puro Anarquismo.

En la época del pinganillo, Mathieu toma todas las decisiones por intuición, volviendo locos a los directores deportivos de los equipos rivales.

En nuestra memoria queda, cuando Patrick Lefebvre catalogó a Mathieu Van Der Poel como impredecible, después de su victoria en Flandes 2020. Tampoco podemos olvidar otro memento épico, la etapa ganada en Tirreno con un ataque a 40 km de meta.

Otras muchas veces, su modo de competir poco sistemático le penaliza. Claro ejemplo es no haber aprovechado a su compañero de equipo Jasper Philipsen en Paris Roubaix (más info en el post del Team Barhein). O tirar de un modo ininterrumpido hasta meta, sin pedir relevos a sus compañeros de fuga.

Conclusión:

Su modo de correr apasiona y divierte, siendo el nuevo estandarte de los aficionados al ciclismo.

Aún estando enamorados de este corredor, consideramos que en un equipo que lo tuviese como único jefe de filas y junto con un director deportivo, con experiencia contrastada, podríamos ver al mejor Caliscómano de la historia, pero esto conllevaría la perdida de su esencia.